Para utilizar este tipo de maquillaje lo más común es elegir sólo un tono de color, para dar un reflejo rápido de color a los ojos. Es muy sencillo: Pinta con un solo tono todo el párpado, usando un pincel de sombra de ojos desde la línea de las pestañas hasta el pliegue del párpado. Después aplica un poco de rubor en la zona de las pestañas inferiores para crear una chispa de color. Para crear un maquillaje natural elige tonos neutros, o si por el contrario lo que quieres es lograr una imagen más atrevida intenta con un color más exótico.
Combinaciones de sombras
Dos tonos de colores te ayudarán para lograr los efectos de luz y sombra, profundidad y definición. Alternar dos tonos claros (la claridad del beige o un amarillo) con un tono oscuro (gris, marrón, azul, púrpura o azul) puede crear diferentes impresiones, como la ampliación del tamaño de los ojos, o incluso aumentar su iluminación.
• La base: aplica una sombra leve en el párpado, desde las pestañas hasta el pliegue del párpado.
• Contorno: aplica una sombra más oscura en el párpado superior extremo y extiéndela hasta el centro del párpado.
Utiliza tres tonos (base, iluminación, forma): los tres tonos de sombra van a cambiar el tamaño de los ojos e intensificarán su color. Experimenta combinaciones más coloridas, más fuertes para una expresividad de mirada más intensa.
Los tres tonos se pueden aplicar para destacar o cubrir diversos aspectos de tus ojos. Por ejemplo, si tienes los ojos muy separados, para hacer que se vean más juntos aplica un tono de color medio y el tono de color más claro aplícalo al ángulo interno del ojo hasta el centro del parpado continuando con el tono más oscuro en la otra mitad.
• Base: aplica un tono medio en el párpado superior, desde las pestañas hasta el pliegue del parpado
• Iluminación: aplica debajo de la ceja el tono más claro
• Formas: estira el tono más oscuro a las esquinas exteriores del párpado hasta la mitad del pliegue.